Diario de a bordo: Cruzando el Atlántico; Dia 3 - mi blog náutico

Espacio blog donde se exponen vídeos, notas de prensa, artículos y noticias relacionados con el mundo de la náutica y el mar.

7 nov 2011

Diario de a bordo: Cruzando el Atlántico; Dia 3

A las 0:00h HRB he empezado la guardia con Juan, despues de haberla hecho Lolo e Ico que son quienes nos han despertado, salimos despues de no haber descansado demasiado pues el barco balanceaba mucho y no conseguia dormir, 8 nudos de velocidad, un rizo en la mayor y génova enrollada, olas enormes pero a favor nuestro, así es que fuera se va cómodo pero dentro no tanto.


Navegando hacia el W


Las dos primeras horas se han aguantado bastante, pero la tercera yo ya no podía más y me entra mucho sueño, así es que Juan ha insistido en que me acostase ya que él si que había descansado y estaba bastante despierto, yo no quería acostarme y dejarle solo, puesto que las guardías las habíamos organizado para que hubiese alguien que supiera navegar con alguien de los que no tiene demasiada experiéncia, con lo que prefiero quedarme en cubierta aunque sea dando alguna cabezada, hasta que cuando faltaban 20 minutos para acabar la guardia, no tuve más remedio que irme a dormir, me tomé una dormidina para descansar y me acosté.

Esta mañana me he despertado a las 8:00h UTC porque el capitán habia arrancado el motor para cargar baterías y dar un poco de paso para adelantar, y puesto que el motor lo tengo pegado al camarote, no soporto el ruido, pero aún así he intentado quedarme un rato para dormir un poco más y eso he hecho hasta las 11:00h UTC, que es cuando hemos cambiado la hora de bitácora ya que hoy hemos pasado el meridiano correspondiente, hemos quedado en llevar UTC -1.

Más tarde, hemos atangonado el génova completamente desenrollado, y la mayor la hemos izado entera, el viento ha cadido, pero aún así, el barco navega a muy buena marcha y ganamos rumbo al W y más adelante ya bajaremos más al Sur.


Ascendiendo
Preparándome
En estas buenas condiciones, aprovechamos para subir al palo, y como ya me temía, el elegido por el capitán, era yo quien debía hacerlo, ya habia subido una vez, pero al palo de un barco mucho más pequeño y además en puerto, debo reconocer que tengo mucho vértigo a las alturas, pero aún así lo he intentado. asíq ue me he puesto la guindola, me he atado dos drizas para subir, y me he puesto tambien un arnés cogido a una driza fija para que evitara que me tambaleara mientras subiera. Habia un problema, una de las drizas estaba pasada por la parte del amantillo del tangón y tenía que soltarla para arreglarla y luego volvérmela a atar para continuar subiendo hasta arriba del palo. Al principio, subía bien, pero cuando ha llegado a la altura del amantillo, cuando me he soltado y he intentado atarme, el barco se balanceaba demasiado, así es que no podía atármela porque tenía que usar una mano para cogerme al palo y solo con la otra no podía hacer el nudo, así es que derrepente me han entrado todos los miedos y fobias que había olvidado mientras subía y me he sentido inseguro de estar atado solo con una driza (que conscientemente sé que es más que suficiente), así que muy a mi pesar, he ordenado que me bajaran a falta de subir 4 o 5 metros de un palo de 18. Estoy orgulloso por haber superado el miedo a las alturas durante un rato, pero no lo estoy por no conseguir bajar la driza que se nos habia quedado ayer y que ha tenido que bajar Lolo, que sin experiéncia y con valentía ha bajado.



Lolo arriba


Hoy ha sido tambien un día en el que me siento contento por haber medido la altura del sol con un sextante y hacer los cálculos a mano para medir una recta de altura y practicar los conocimientos que estudié para CY de las dos asignaturas que tengo aprobadas, es la primera vez que lo hago y me ha salido bien, estoy alucinando, pensaba que la práctica sería más complicada que la teoría.

Sobre las 16:00 UTC hemos comido unas patatitas con huevo frito, salchichón y queso parmesano, una comida muy agradable porque el tiempo estaba muy despejado, el mar no muy revuelto y el bimini nos da mucha sombra.

Llevamos intentando pescar desde el primer día y no hemos tenido éxito todavía.

Por la tarde teníamos buen mar y buen viento, no demasiado pero ibamos muy cómodos. Por la noche de nuevo me ha tocado el último turno así es que despues de ayudar al capitán a configurar su PC, he cenado un poco y me he ido a dormir.






Pages