El capitán ha preparado una ensalada de tomate, aceitunas, cebolla y dorado que pescamos ayer como entrante, y despues unas patatas con huevo frito. Despues de comer, el capitán por fín se ha decidido a poner rumbo al Sur, digo por fin, porque los tripulantes que sabemos algo de navegación, sabemos que es allí donde está el viento, y llevamos días comentándolo, pero el capitán es quien tiene la autoridad, y eso hay que respetarlo siempre, y supongo que lo hará por algo, así es que ahora nos vamos a buscar viento izando el Gennaker para ir más rápidos.
Ahora mismo estoy escribiendo en mi guardia puesto que es la primera, la gente se ha ido a dormir y está complétamente oscuro, hace días que fue luna llena y la luna cada día sale una hora aprox. más tarde que el día anterior, encima se ha hecho más pronto de noche porque hemos vuelto a cambiar el huso horario y hemos atrasado una hora más, pero no me importa porque estoy disfrutando de ver una noche estrellada en medio del Atlántico, cosa que llevo soñando desde hace mucho tiempo. Increible lo bien que se ven las estrellas la cantidad que hay, me doy cuenta de la contaminación lumínica que hay en España. Acabamos de tener la visita de unos delfines, no se veían bien, pero si que se oían y han estado un ratito con nosotros. A la vez estoy corrigiendo el rumbo puesto que llevamos el gennaker y el viento es muy racheado.
Tambien estoy pensando que hoy el capitán está un poco preocupado porque el barco hace agua desde el primer día, y no sabe por donde, aunque no hay que alarmarse del todo porque de momento está controlado y solo hay agua cuando estamos amurados a estribor. Ah, por cierto, los peces voladores nos atacan, uno ha salido disparado y le ha dado a Javier en la cabeza pero lo único que ha hecho es impregnarle de olor la chaqueta.